
La cámara en 'Mortadelo y Filemón. Misión: Salvar la tierra'
por David Acereto, segundo operador
Desde su concepción la película nunca se planteó como una secuela al uso, y aunque era inevitable tener referencias de la primera parte, intentamos darle un aire distinto más fiel al cómic de Ibáñez. Para ello tuvimos referencias del propio cómic (muchos cuadros están inspirados en sus viñetas con aires más grandes por arriba para acentuar la alopecia de los personajes), referencias de películas como Spiderman 3 para alguna secuencia de acción, Brasil de Terri Guilliam para efectos ópticos de proporciones o Kon Fusión por su narrativa cinematográfica.

EPC fue la empresa encargada de proporcionarnos las dos cámaras de rodaje, una Arricam ST como cámara A, y una Movicam Compact como cámara B que casi todo el rodaje se utilizó en la Steady cam de Peque Griffin (Steadycam Factory).
Una de las dificultades del rodaje eran sin duda los numerosos efectos digitales que teníamos que filmar: insertar personajes 3D, caídas, golpes, persecuciones, atropellos, viajes en el tiempo... Para ello contábamos con la experiencia de Eduardo Díaz de El Ranchito y del ayudante de dirección Jorge Calvo, que hicieron un gran trabajo sobre todo por la limitación de tiempo a la que nos enfrentábamos.

Esto añadido al uso de grandes angulares de la cámara a poca distancia de los actores hacían una película especialmente difícil para el foco y para iluminar a los personajes. Unax utilizó pequeños leds que él mismo acercaba a los actores cuando la cámara, con su parasol de 6x6, se acercaba.
En cuanto a la fotografía, hay un trabajo previo de la paleta de colores muy interesante en los geniales decorados de Antón Laguna. Como a Unax le gusta mucho controlar el color, utilizó las emulsiones de Kodak 250D 5205 y 500T 5218, y realizó el etalonaje final en Kinema, aunque el revelado del negativo se hizo en Technicolor.

Me gustaría agradecer a los actores de esta película su profesionalidad porque se enfrentaban a posiciones muy incómodas, con marcas en el parasol y en el suelo, con arneses de seguridad, a largas sesiones de maquillaje, que dificultaban mucho su trabajo y que realizaron en todo momento con muy buen rollo.
En definitiva una película muy dinámica, con muchas herramientas para el movimiento de la cámara y muchísimos efectos especiales y digitales.
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David Acereto también ha trabajado como segundo operador en El menor de los males (2007), La luna en la botella (2007), Bosque de sombras (2006), Los Borgia (2006), Torrente 3: El protector (2005), Isi/Disi: Amor a lo bestia (2004), entre otros largometrajes. Y aún sin estrenar, El Patio de mi cárcel (2008).